5.10.2005

No seas mala con la Nat

El miércoles vi en cine Masacre en Texas. Y es que gana siempre toda mi atención la vida ejemplarmente fuerte y sórdida de asesinos seriales, que mi curiosidad es la de querer comprender lo ocurrido de una vida así, ejemplo 1.
La vida de Edward Gein, que a través de una obsesa fijación por su enloquecida feroz religiosa madre, Gein termina buscándola de verdad en su repulsión hacia las mujeres.
Un tímido granjero perturbado de ojos claros, rubio y endeble, con 40 años tiene la saturación del desamor humano dejado a otro humano, pero al ser reproducido, se multiplica y divide, mayormente fragmenta, la fragmentación tiene una persecución, el fin es restituir la unidad al ajustar fragmentos, que da la certeza de unidad.
Y si Gein PENSÓ en varias momentos en un mundo similarmente pensado al que pensamos todos, estupendo, y luego, en un sólo momento desmantela la realidad y mata a la tabernera del pueblo Plainfield, -me- queda explicado que estaba aburriéndose. Sale en persecución de ciervos, Gein creía que una mujer no era un humano sino un alce: “El Ciervo. Corté al ciervo, acorralé al ciervo, gritó el ciervo”, y de seguro estaba aburriéndose tanto como ser-psicópata que, si el tiempo no tiene una duración secuencial sino que cada momento es un tiempo separado de todo el Tiempo demás en un asesino serial, y si alguien considera una mujer un alce, también tiene otra capacidad desvariada; la idea diurna de que el mundo es normal para asesinar, de seguro es porque se trata de alguien ansioso de placer inmediato, el placer inmediato es transitorio, en sí es breve y sin embargo intenso, pero la intensidad es un punto alto del cual se viene en un sentido diametralmente opuesto al que se subió, y así como en el sexo existe la tristeza post-coito, también existe la depresión post-asesinato, crisis por demás aburridas, pero si ninguna "te suicida", vuelves a tener sexo o matar.
De seguro se aburría, porque el aburrirse me hace razonar que se sobrelleva, resistir el aburrimiento asesinando ha de ser de lo más pesado, a) Nunca habrá una segunda vez igual a la primera vez que se asesina, por tanto, en la segunda vez que se haga se abreviará más de la primera, hasta que continuamente sea de tedio asesinar, y con el tedio viene un acortamiento de sensibilidad y conciencia. Tantas veces asesinando terminan por hacer al asesino alguien fatigado, no de energía, sino insensible a matar demasiado, y el adjetivo negativo demasiado es por excesivo. Y todo exceso, es un abuso cansado.
b) El asesino es enamorado de su primer asesinado, Gein buscaba a su madre en cada ciervo, el primer asesinado es una pérdida que se repite asesinando con cada vez menos intensidad de algo que nunca se recobra; el aburrimiento es además desabrimiento, y volver a matar, no hace más excitante sino original el primer asesinado de todas las versiones que alguna vez confirieron excitación. Asesinar a fuerza de hacer lo mismo, siempre será igual, no único.
c) El asesino y yo podemos soñar con una versión de familia: La familia ha de ser una continuidad, pero la familia del asesino es una traza, hubo una original, en un tiempo, el asesino busca no reproducirla por copia exacta de, sino respaldarse en ella. Las versiones de familia del asesino dispersan la experiencia original de familia, pero el asesino suprime donde quisiera respaldarse, su familia, como experiencia original, es otra búsqueda comediante, si es la pérdida es resuelta. Las versiones de familia que vive son un recordatorio de que son variantes de la original, muestra para que si yo quisiera hacerme de una familia, no empezaría por matar a todos los que tengan parecido con mis padres, Gein creyendo hallaría y podría resucitar a su madre profanando el cementerio local, desnucando chicas en su casa del campo, es una inconsecuencia de búsqueda de la familia original para ser tenida otra vez.
A eso de la media madrugada encender el televisor me parece de lo más violento, en sí el contenido de la televisión es agresivo e irracional. Hace no muchos días lo prendí a las cuatro o dos de la madrugada: infomerciales dirigidos siempre al adelgazamiento y líneas telefónicas eróticamente atinadas, y en el canal 2 nacional iban abriéndole con un cuchillo grande y alargado la piel de la frente a una mujer, un hombre subido en ella excitado y concentrado, muy fuerte la imagen, pensé que era una ronda de películas gore, ¿pero por el canal 2?, sucesivamente habían más imágenes atroces e inútiles y todas con mujeres victimadas, lo que me hacía recordar que alguna vez, sentada en la cama de mi chico, lo estaba esperando a que regresase, mientras que leía un manojo de hojas sobre la Estructura social por Radcliff-Brown y no había nadie en la casa o vecinos, solamente yo, y me di cuenta que empezaba a sonar música encantadora de la parte de atrás de la casa, la música era del Fonógrafo, mi preferida, y continuaba sonando, y yo, sabía que no había nadie, me había despedido de la linda vecina y esperaba a mi chico sabiendo que llegaba en dos horas, así que empecé a sentir que alguien estaba escondido en el baño esperando a que yo fuera a ver por qué posiblemente había música en la grabadora del baño, puesta en esa estación especialmente y matarme. Seguramente el asesino y yo estábamos mutuamente invadidos en un lapso que duró un microsegundo por conocernos y comenzar la suspensión de mi vida y ese instante, yo quería ir a ver al baño, claro que esto, ahora recordado así, es la recreación de la propia muerte en el escenario de un baño diminuto, donde escondido con una urgencia de voracidad por experimentar extremos en el comportamiento, el asesino, quisiera imaginar, desarrollaba un estado emotivo por la situación, deseado a través de alguna manipulación por mí, al estrenar materiales psicológicos para usarse en la crudeza de una experiencia terminante y directa de ser asesinado por un obsesivo profesional. Claro que, esta fragmentación ideal del asesino y yo es generada por el esfuerzo de una sobrevivencia imaginada no en la fuerza muscular, sino porque el asesino tenía esquizofrenia absoluta y yo con constantes y variables ideas de un amplio repertorio de manipulación era el intérprete de su destrozo intelectual, que lograba un intento para que no se diera eso que imagino cuando se muere, un sonido blanco.
Historia improbable de que lo lograse. Ya imagino el viaje que hizo, introduciéndose en la casa, atrás del excusado a esperar la salida de todos, sintonizando la 1150 AM, sabiendo que yo iría a averiguar si la música provenía del baño, sabiendo que ha visto a otros haciendo lo mismo y aunque yo sabía que estaba ahí, imaginándomelo, soñaba que simplemente caminaba a ver, esto era distinto, algo me empujaba ir a hacerlo, una vez llegado el momento estaba ahí, sí, escondido a un lado del excusado junto a una báscula descompuesta y el bote con basura lleno, y así me quedé en la puerta viéndonos, -debería invitarlo a hacer fila los domingos en un mercado de la ciudad-, su vida de segunda igual que soñar que todo marcha bien. Su figura era la de una persona asediada, lo que logra significar que intenta que las cosas ocurran en el mundo y le presiona tanto ese esfuerzo, que mientras paseaba cerca de esa casa, saber asesinar nunca lograba ser lo suficiente bueno.

Escrito por: Natus producciones
Pa mi pequeña Nat, porque no te olvido y te agredezco todo. Sigo aquí mi tiny friend. Sigo esperando tu blog!!!

1 comment:

catarro said...
This comment has been removed by a blog administrator.